El multirracialismo en relación con el judaísmo

 

 



 

El multiracialismo y el judaísmo son fenómenos que están irrevocablemente entrelazados. La explicación a esta afirmación nos la dictan tanto los propios hechos coetáneos como la propia historia.El judaísmo, por su parte, siempre ha tenido la intención de destruir la cultura y la identidad de todo pueblo que no sea el suyo. En todos sus textos, tanto religiosos como laicos se observa una profunda separación entre lo que ellos llaman gentiles-no judíos- y judíos (véanse las palabras vertidas en libros como la Torah o el Talmud). Así pues, es demostrable que la segregación racial que profesan los judíos con respecto a los demás pueblos de la humanidad no es una opinión subjetiva. Dado el odio a las demás razas el judío intenta deshacerse de los gentiles a través de su espíritu cosmopolita e universal para con los demás: mezcla todo menos lo suyo y tan sólo pretende el triunfo de su humanidad, de su raza. De aquí a que el multiracialismo hoy día imperante provenga de la raza mosaica.El judío, como se ha dicho arriba, ha utilizado diversas tretas para intentar deshacerse de lo que lo molestaba con mayor profundidad, por ello ha tenido que inventar ideologías de toda índole para conseguir su fin. Ejemplos claros de estos inventos provenientes del judío son el marxismo y el capitalismo-el uno encerrado en los soviet y el otro en la democracia liberal-.Por un lado se habría de analizar en manos de quien estuvo, está y ha estado siempre el marxismo: El ejemplo de Marx es apabullante para hallar la solución al problema, ya que, como sabemos, Karl Marx era un judío matemático, que desde el cómodo sillón de una oficina especulaba sobre los problemas obreros y sobre sus desgracias. Ya dijo José Antonio Primo de Rivera que las ideas marxistas tan sólo podrían salir de la cabeza de un judío matemático o bien Ramiro Ledesma que los tildó-a los judíos- como los únicos seres capaces de destruir las ideas de Patria.No sólo es Marx el único judío que ha dominado la idea marxista sino que detrás de cada sindicato o asociación obrera comunista se encuentra un Israel o un Samuel, para defender hipócritamente al trabajador. Fíjense en Samuel Gompers, creador del sindicalismo económico en los EE.UU., en Lenin o en Trotsky, al parecer todos de ascendencia judía.Pero, si bien el marxismo siempre ha estado en manos de judíos, no es menos cierto que el capitalismo-o democracia liberal- también ha sido dominado por el “pueblo elegido”. La historia misma ha evidenciado el hecho de que el mejor instrumento del capitalismo ha sido la llamada democracia-poder del pueblo tan sólo en su sentido etimológico-. La ventaja suprema de este sistema es que el judío puede actuar en él a sus anchas sin que nadie moleste su función. Son múltiples, actuales y reales los ejemplos que muestran el dominio hebreo en el capitalismo: Atiéndase a las familias Rothschild o Rockefeller, dueñas de gran parte de la economía neoyorquina y en consecuencia norteamericana y mundial; o bien en España las Koplowitz, las multimillonarias hermanas judías o el presidente del Banco Mundial, o un larguísimo etc.

 

El caso del capitalismo es más complejo que el del marxismo, ya que se sabe que en éste último el dominio del judío tan sólo se concentraba en los soviet-en Rusia-, que en realidad era la institución con poder en el Estado; pero en cambio, en la democracia liberal el esperpento es aun mayor: Tal como se observa en la realidad, en la democracia liberal son muchos los partidos políticos con distintas “ideologías” que luchan incesantemente para que los ciudadanos decidan apoyarles.Consciente de que quien opine en esta línea y con estas apreciaciones aludiendo a los judíos será tildado de antijudío, habría que poner en claro la objetividad y obviedad de lo anteriormente afirmado con aún más claridad:El judío basa todo en su propio interés y en la animadversión que siente hacia otros pueblos, como decía, hecho tipificado en los famosos y censurados Protocolos de los Sabios de Sión, el Talmud o la Torá, donde se observan palabras como éstas: “Los judíos son llamados humanos de condición, pero los no judíos no son humanos. Ellos son bestias.” (Baba mezia, 114 b). Dichos libros son lo bastante elocuentes como para negar lo obvio, ya que en concreto en los protocolos el judío elabora una serie de premisas con el objetivo de terminar dominando el mundo por completo, hecho ya consumado. Es pues razonable que el hebreo haya utilizado distintas elucubraciones para poder dominar el mundo, de ahí a la explicación del marxismo y el capitalismo. Cada uno es instrumento del otro, es decir, que este binomio que está en principio enfrentado radicalmente, en realidad está hermanado en lo más profundo de su ser. Ya muchos grandes hombres de los años 30 opinaban que el marxismo-imperante en la época ya en Rusia y amenazante en toda Europa- era un mero y llano instrumento del capitalismo financiero judío para poder controlar el mundo. Huelgan comentarios, las profecías se han cumplido.

 

Entre estos dos pensamientos se hallan varias similitudes, pero sin duda la más a destacar es la de que tanto en un pensamiento como en el otro se apuesta por una globalización del mundo, así pues la consigna del marxismo reza “obreros del mundo uníos” o bien, y por otra parte, y aunque con la misma intención, el capitalismo pretende unir el mundo con la única consigna del dinero y del mercado internacional. Se ve pues que los dos pensamientos inventados por judíos pretenden, a través del internacionalismo, acabar con los valores espirituales que han imperado por tanto tiempo en Europa (la idea de Patria, la identidad, la Raza, etc.). El pensamiento internacionalista materialista no podría salir de otra raza sino de la judía.Es lo suficientemente vasta la explicación como para alargar más la perorata ya que queda demostrado que el multiracialismo es un fenómeno globalizador en el cual todos los pueblos pierden su identidad y su idiosincrasia, sin duda, en detrimento de la humanidad.

 


Las consecuencias del multiracialismo



 

 

Las consecuencias del multiracialismo son ya lo sobradamente palpables y perniciosas como para analizar sus problemas, presentárselos al pueblo y darles una solución. Los NS, sabemos de esta situación desde sus comienzos, y por ello, y dada la repulsa que nos causa, tendríamos que intentar hacer ver a los no NS la solución sencilla y natural que se le puede dar a ésta mezcla racial que ahora tiñe las distintas naciones europeas.Dada ésta situación es interesante analizar algunos puntos de las innumerables consecuencias que trae consigo el caos multirracial. Así pues, me gustaría comenzar hablando de uno de los puntos donde se observa con mayor claridad el problema:- El Ejército: Para el NS, y simplemente para la concepción natural y tradicional, el Ejército supone un esfuerzo colectivo conformado por seres que sustentan algo en común, se trata de un cuerpo creado con el objetivo primordial de defender los intereses y de preservar la sangre pasada, presente y futura de las personas que forman parte de una misma Patria. Es así como se debe concebir un Ejército nacional, es decir, como una milicia nacional en sentido estricto, donde cada uno de los ciudadanos de una comunidad esté dispuesto, por su propia voluntad, a darlo todo por su Raza y su Patria.

 

En cambio, en la actualidad la manera de ver al defensor de la Nación es radicalmente la antítesis de lo que tradicionalmente se ha comprendido como Ejército. Vemos en las filas de “nuestro” Ejército a hombres que, desde luego, no tienen nada en común. Al Ejército lo anuncian como si de una ONG se tratare, un Ejército repleto de mercenarios-esperemos que con alguna excepción- que lo único que buscan es su propio sustento y no el de una Patria común. Evidentemente unos mercenarios no están dispuestos a morir por una idea o por su Patria, dado que observan a su Ejército como un tipo de trabaja más y no como una agrupación de hombres dispuestos a sacrificar su vida por su sangre. El hecho de que el Ejército se haya convertido en un tipo de trabajo más ha conllevado a que en él se enrolen seres de todos los lugares con la simple y nauseabunda aspiración del dinero y no con el objetivo de mantener en alza los eternos valores que deben sostener a un Ejército.

 

Un ejemplo claro de ésta degeneración en el Ejército lo encontramos en cada desfile militar del 12 de Octubre (Día de la Hispanidad). Apuesto a que en este desfile marchan juntos hombres y mujeres de al menos veinte nacionalidades distintas. Es imposible que entre esas personas pueda haber relación alguna, dado que sería extraño que un indio quechua o un negro del Congo quisiese defender a España y Europa, ya que éstas nunca les pertenecerán y nunca llegarán a formar parte de ellas.- Por otra parte otra de las consecuencias de la degeneración multiracial es la mezcla racial en los centros de enseñanza. Como ya es habitual es fácil ver salir de una misma aula a niños de diversas nacionalidades. En principio, y según nos dicta el sistema, esto es enriquecedor para los niños españoles y europeos, pero los datos y la realidad hablan de forma muy distinta. Se nos quiere hacer ver que un indio o un asiático pueden convivir indistintamente con un español, pero como muestra la realidad ésta afirmación difiere ampliamente con ello. Cada día observamos como el choque cultural y racial llega a cotas cada vez más altas, ya que la educación, la formación y la manera de ser y vivir de un indio-por ejemplo- es muy diferente a la de un español, su manera de avanzar en la educación es normalmente menor, lo que en multitud de ocasiones hace que los españoles se vean abocados y se vean obligados a aprender menos y con mayor lentitud.

 

Sin duda éste es un problema fundamental que trae consigo el choque cultural y racial en los centros de enseñanza, pero, sin duda, no es ni el único ni el más importante: Ya vemos a diario los problemas que la mezcla racial en las aulas consigue en lo referente a la formación de grupos enfrentados de diversa índole “ideológica”. Lo cierto es que los niños conforme van creciendo van formando grupos, habitualmente, en concordia con su raza, lengua y cultura, lo que hace que se formen bandas diferenciadas dentro de un mismo colegio. Véase la demostración más clara en ésta línea en el fuerte desarrollo que ha obtenido la pacifica y productiva Asociación Cultural de los Reyes y Reinas Latinos (los Latin Kings) en gran parte formada por jóvenes menores. El hecho de que éstas bandas manden ahora dentro de nuestros colegios y ciudades hace que o bien el joven se una a ellos- hay españoles que toman parte dentro de los Latin Kings, dato curioso, pero real- o bien se enfrenten a ellos, formando así distintos frentes culturales y raciales.
La solución es sencilla siempre que se la quiera dar. El ejemplo más claro es el que ha sucedido en Holanda, donde las autoridades o los profesores no han visto mejor remedio que el de separar a los niños según sea su raza, por el bien de la educación de éstos y por el tremendo choque cultural que suponía el unirlos. Es, pues, una evidencia que la mezcla racial en los colegios es contraproducente y degenerativa para los niños y los miembros de la Nación.- Otro de los problemas a analizar de los múltiples que se observan en la sociedad multirracial es la degeneración musical: La música, como parte del arte, es una de las más claras representaciones de las características de una cultura y una raza. Es una de las formas que tienen los hombres de una comunidad de expresar su sentimiento y su idea. Así pues, la música se puede considerar como algo enraizado en lo más profundo del ser.

 

En la actualidad la música europea no es representación de la espiritualidad de Europa sino que se nos quieren imponer unos ritmos y sonidos implantados por la fuerza, y en verdad, radicalmente opuestos a nosotros. La ejemplificación más obvia es la de la importación de ritmos musicales como el reggeton u otros ritmos provenientes de África. Huelga comentar ampliamente que ésta música no nos representan. Por tanto, se nos inculca desde el sistema, música extraña a la que es la nuestra y la de nuestros ancestros, intentando hacernos ver que es mejor una representación de un “rapero”, que una interpretación de Wagner o Beethoven.Es pues, incuestionable, el nexo causal existente entre el importe de distintas razas y la degeneración musical y artística europea.- Los tres problemas vistos anteriormente son sin duda hijos del multiracialismo, pero sin duda, lo que afecta con mayor agresividad al pueblo español son los problemas estrictamente cotidianos. Uno de ellos y quizás el más claro y consecuente del multiracialismo es la delincuencia que éste trae consigo.

 

Es un dato meramente estadístico, y por tanto, objetivo, el de que la delincuencia es cometida en su mayor parte por personas no españolas. El sistema y sus lacayos nos pretenden imponer una idea falsa en este contexto, ya que, nos dictan que la delincuencia no depende de la raza ni de la nacionalidad, sino de cada persona-sin tener que ver sus características-.Lo cierto es que es extraño el día o mejor dicho la hora en la que un español no resulte dañado por parte de un extranjero dentro de nuestros pueblos y ciudades. Los datos estadísticos confirman ésta afirmación, ya que, desde que el problema multirracial ha aflorado en Europa, la delincuencia ha subido hasta cotas nunca conocidas. El ejemplo más reciente de ésta delincuencia importada lo hemos visto en los sucesos acaecidos en Francia, ya que, las revueltas fueron producto de no franceses, fueron días de caos y destrucción alimentada por personas que ni siquiera deberían habitar Europa.En conclusión, y tras haber analizado estos cuatro problemas no es necesario incurrir aún más en los problemas que vienen a formar parte del multiracialismo, ya que la enumeración y explicación de estos sería objeto de un vastísimo estudio innecesario para simplemente demostrar que este caos racial es contraproducente no sólo para Europa sino para toda la humanidad.

 

La pérdida de la identidad y el resurgir de los valores

 

Multiracialismo es sinónimo de globalización y este, a su vez sinónimo de la pérdida de la identidad:El binomio multiracialismo-globalización está concatenado y llamado a ser el fenómeno que acabe con todas las razas y culturas de los diversos pueblos de la tierra.


 

Es pues, la globalización heredera directa del sistema de mercado impuesto en el mundo, y por lo tanto, el fenómeno culpable de los distintos movimientos migratorios que llevan a la degeneración multirracial. De algún modo, los lacayos y miembros del sistema globalizador pretenden imponer en el sentir popular el “tratado” humanitarismo-negocio. Este “tratado” no es más que una burda farsa de clara evidencia, ya que, a pesar de que se quiera hacer ver que con el fenómeno multirracial se pretende un mundo más igualitario y justo, en realidad lo único que se consigue con la internacionalización es que todo pueblo pierda sus tradiciones, su cultura y su raza a favor de modas y mezclas impuestas por los “humanitarios” miembros del sistema dominante.

 

De todos modos, esta falsa moral utilizada por los dueños del mundo-dueños por tanto del modelo globalizador- es creída por la mayoría de los habitantes del planeta, sin duda engañados y mal informados.El mundo que se busca es la antítesis de lo que tradicionalmente ha sido, un mundo en el que todos comamos, hablemos y vistamos de manera uniforme, planeta en el que la particularidad e idiosincrasia de cada pueblo sea sustituido en favor de un solo estilo de vida.
Quizás, la mayoría de los ciudadanos de toda Europa como los mundiales no se hayan parado a pensar en torno a ésta pérdida de la identidad amenazada por causa de la globalización que afecta a cada una de las naciones, y lo que ello supone; o bien crean que tal problema no les incumbe. La pérdida de la identidad de los pueblos supondría- y lo está suponiendo- un paso irreversible para la historia de la humanidad, paso que llevaría a hacer del mundo algo homogéneo, donde resulte indiferente el lugar donde hayas nacido o habites dada la pérdida de peculiaridad de todos los rincones del planeta.Se ve pues, como cala profundamente la calamidad del sistema globalizador, y que ya es tiempo de que los hombres de bien se arrojen a la lucha y que ensalcen de nuevo valores eternos inherentes a cada Patria, valores eternos, ahora desarraigados y sustituidos por frívolas modas impuestas por los enemigos mundiales. Es hora, pues, de recuperar la identidad por el bien de la humanidad, de nuestra Europa y de su Sagrada existencia.